Este ha sido el artículo más difícil que he hecho hasta ahora. Explicar de manera fácil y entretenida para el lector de que se trata el trabajo que quiero emprender es realmente complicado. Esto es lo que haría si fuera el Sociólogo Deportivo de la Selección Nacional de Venezuela de fútbol. Siguiendo pasos de grandes en el área como José Jacinto Muñoz (su libro, “Gente con Propósito”, ha sido de gran ayuda), exploro este tema con causas, condiciones y acciones a tomar para poder tratar el problema planteado y llevarlo al éxito grupal y competitivo. Espero les guste.
Prólogo
Tomás Rincón, capitán de la selección venezolana de fútbol, participó en el programa radial “11 titular”. Habló de la Vinotinto y su balance de las dos jornadas de Eliminatoria Sudamericana a Rusia 2018. “También nosotros hemos quedado un poco preocupados, más allá de los resultados (…), si hay algo que habíamos conseguido y conquistado era tener un equipo competitivo, a base de “un espíritu de grupo” que se había hecho muy fuerte y que por estas dos fechas lo hemos perdido un poco”.
También Rincón recalca hasta en tres oportunidades su preocupación por no perder la competitividad ganada porque “aquí nadie nos ha regalado nada, hemos crecido por mérito propio y tenemos que trabajar para ser más competitivos”. Cuando le hablan del DT nacional, Noel Sanvicente, el mediocampista tachirense opina que “Yo creo que a Noel se le ha puesto la situación cuesta arriba porque desde que llego los resultados no son los que esperaba y por ahí empiezan las dudas, y creo que también ha falta un toque de suerte (…)” “(…) Si bien nosotros estamos siempre en la disposición de adquirir el mensaje, de plasmarlo rápido en la cancha en los pocos días que uno tiene para entrenar en la selección, la verdad que este inicio para Noel no ha sido fácil, lo sabe él, lo sabemos nosotros y esperemos que en estos próximos partidos lleguen los resultados.”
Por último, Tomás Rincón afirma: “Hay que hacer de esta amargura una energía positiva, de que esa rabia te lleve a estar un poco más enfocado, a tener más energías(..)” (La entrevista completa en https://soundcloud.com/11titulardur/tomas-rincon-hay-que-hacer-de-esa-amargura-una-fuerza-positiva).
Análisis de entorno
El primer paso de un sociólogo deportivo es analizar el entorno del equipo. No se puede intervenir en una sociedad (en este caso una selección nacional de fútbol) si no se observa el entorno que los envuelve y penetra, de la manera más completa posible. Mientras más elementos se tomen en cuenta, la acción a realizar podrá ser más efectiva. En este caso, voy a señalar 3 factores principales: La naturaleza del técnico, los jugadores, y la dificultad del torneo.
La naturaleza del técnico: Noel Sanvicente es el entrenador más ganador del fútbol nacional, y no es un título subjetivo, su trayectoria y títulos así lo demuestran. De ahí hay que destacas dos cosas: una positiva y la otra negativa. El aspecto positivo es que “Chita” tiene una mentalidad ganadora, hace lo que tiene que hacer para llegar al objetivo; a veces ha tenido dificultades externas (infraestructura, economía, talento en jugadores) pero las ha superado y eso dice bastante del “hambre” que debe tener un DT. El aspecto negativo es que su experiencia ganadora ha tenido un factor común: siempre ha sido en clubes, nunca en una selección nacional. Trabajar con un club te hace ver a los jugadores todos los días, seguir en primera persona el progreso de la idea propuesta. Trabajar con una selección nacional con tantos jugadores en el exterior implica un cambio en la concepción de la idea, ya que no ves a tus jugadores principales sino 4 o 5 días antes del partido. Esa falta de experiencia en selecciones nacionales afecta la idea del “profe Chita”, por lo que se convierte en un problema en el quipo.
Los jugadores de la selección: Venezuela ha aumentado notablemente la cantidad de jugadores nativos en el fútbol internacional, eso genera mayor roce con el deporte de alto nivel, lo que indudablemente favorece a la selección nacional. Ahora, pareciera que estos jugadores no se han desconectado del anterior DT de la Vinotinto. La mayor prueba de eso es la salida del principal referente de la selección, Juan Arango, quien no ha escondido su incomodidad por el sistema de juego planteado por Sanvicente, tanto así que signó su salida. La presión en los referentes también es factor importante. Ver a jugar a piezas como Rondón, Baroja, Vargas y Amorebieta con tal nivel de presión denota una necesidad de resultados utilizando más las ganas que la técnica. La idea no llega clara a un grupo de jugadores que están muy acomodados con la idea anterior, y que no tienen tiempo suficiente de germinar una nueva. El trabajo es lento, pero la urgencia de resultados es alta, y con eso, la frustración.
La dificultad del torneo: Vamos a estar claros, no hay eliminatoria mundialista más difícil que la sudamericana. Es la más larga, compleja y exigente del mundo. Conmebol ha colocado 5 de 6 equipos en octavos de final en Brasil 2014, 5 de 5 en Suráfrica 2010, 3 de 4 en Alemania 2006. Sin incluir la diversidad geográfica de América del Sur: el jueves puedes jugar a 3600 msnm en La Paz, para el martes jugar en Barranquilla, a nivel del mar y casi 40 grados centígrados. Al jugar los 10 países inscritos en “todos contra todos”, los equipos buscan hacerse fuertes en su casa, sacando provecho de su afición y de sus potencialidades. Es por eso que a Venezuela le cuesta tanto cada error que comete, porque las eliminatorias sudamericanas no perdonan errores. Actualmente la Vinotinto esta noveno, y se viene Bolivia de visita y recibir a Ecuador.
Acciones a tomar
Para el sociólogo deportivo es tan importante analizar cómo actuar. Las medidas a usar en la selección las baso en tres pilares fundamentales: El apoyo didáctico, la actividad grupal y el mensaje.
Apoyo didáctico: Al momento de conocerse la convocatoria, me gustaría hacer llegar a los seleccionados y al equipo técnico un agente motivacional que los ayude a entender la idea desde el sitio dónde están. En este caso le haría llegar a los jugadores una lectura que los vaya colocando en sintonía, y no considero una mejor opción que “El efecto Simeone: la motivación como estrategia”, con especial al capítulo 1 y al tema “Fe y convicción”, donde “El Cholo” habla de su experiencia en la final vs Boca cuando dirigía a Estudiantes. La idea de escrudiñar este tema es entender que la motivación te hará emprender empresas aparentemente imposibles, y que depende del equipo saberse fuerte aun cuando el entorno se note complicado. “Mi labor con los jugadores era convencerles de que siempre iban a tener una posibilidad de ganar el partido, y que el otro equipo no era infalible, también se podía equivocar. Es esto lo que hay que aprovechar. Aunque haya sólo una posibilidad entre cien, hay que agarrarse a ella.” Diego Simeone
Actividad Grupal y Mensaje: Para el momento de la actividad grupal hay que tener claro que el cuerpo técnico designo una doble convocatoria para estas dos fechas: para La Paz citó a jugadores del torneo local y para el partido de Puerto Ordaz a los extranjeros. Para el grupo que va a Bolivia la actividad a realizar sería una facilitación centrada en una misión que fomente la competitividad de la unidad en función de las circunstancias adversas. Esa actividad incluiría que cada individuo tenga una función en específico, lo que genere una responsabilidad en pro del grupo. ¿El objetivo principal? Que el grupo se sienta victorioso al lograr la meta propuesta cuando las condiciones sean adversas. Entender que cuando el grupo está concentrado, y que cada jugador está consciente de su función, la meta es alcanzable y posible.
Para el grupo que jugará vs Ecuador, la actividad sería distinta. Con los jugadores convocados para Puerto Ordaz trabajaría bajando la presión del grupo. Haría dinámicas que faciliten la comodidad y el humor del grupo. Luego, en total confidencialidad y acompañado del psicólogo, fomentaría el desahogo de los jugadores ante las ideas impartidas por el cuerpo técnico, para luego finalizar con la importancia del papel funcional de cada individuo en el sistema del equipo. La facilitación final sería utilizando la concentración como herramienta primordial para llegar a la meta como grupo.
Conclusión
El espíritu no se puede perder. Que el capitán lo diga quiere decir que el grupo esta resentido y es un tema de mucho cuidado. Por ende, la misión del sociólogo deportivo es facilitar la transición de una idea técnica a la otra, poder separar el espíritu de la concentración táctica, y buscar la unidad del equipo ante la adversidad de los factores.
No se es el peor equipo cuando se pierde, ni el mejor cuando se gana, pero en esta carrera de resistencia hay que saber apreciar que las ganas y el hambre de resultados positivos pueden hacerte progresar en tu nivel competitivo. Por el contrario, el desánimo y el desgano hacen que bajes el nivel. El entrenador debe entender esto y buscar que eso juegue a su favor “Si el DT logra penetrar en la mente del jugador, puede mejorar de forma muy importante su rendimiento” (Simeone).
La conclusión también debe salpicar a periodistas y fanáticos. Es importante entender que el espíritu competitivo tiene que tocar las fibras de los hinchas venezolanos, dejar de ir a apoyar al equipo no es una opción. Encarar las eliminatorias suramericanas como una nación unida (como lo hacen el resto de los países) facilitará el proceso de adaptación del equipo. Hay que apoyar, hay que construir, hay que depositar confianza, y, por sobre todo, hay que inyectar de motivación a un equipo que hoy más que nunca necesita el apoyo de su país. Somos la esencia de ese espíritu.
Prólogo
Tomás Rincón, capitán de la selección venezolana de fútbol, participó en el programa radial “11 titular”. Habló de la Vinotinto y su balance de las dos jornadas de Eliminatoria Sudamericana a Rusia 2018. “También nosotros hemos quedado un poco preocupados, más allá de los resultados (…), si hay algo que habíamos conseguido y conquistado era tener un equipo competitivo, a base de “un espíritu de grupo” que se había hecho muy fuerte y que por estas dos fechas lo hemos perdido un poco”.
También Rincón recalca hasta en tres oportunidades su preocupación por no perder la competitividad ganada porque “aquí nadie nos ha regalado nada, hemos crecido por mérito propio y tenemos que trabajar para ser más competitivos”. Cuando le hablan del DT nacional, Noel Sanvicente, el mediocampista tachirense opina que “Yo creo que a Noel se le ha puesto la situación cuesta arriba porque desde que llego los resultados no son los que esperaba y por ahí empiezan las dudas, y creo que también ha falta un toque de suerte (…)” “(…) Si bien nosotros estamos siempre en la disposición de adquirir el mensaje, de plasmarlo rápido en la cancha en los pocos días que uno tiene para entrenar en la selección, la verdad que este inicio para Noel no ha sido fácil, lo sabe él, lo sabemos nosotros y esperemos que en estos próximos partidos lleguen los resultados.”
Por último, Tomás Rincón afirma: “Hay que hacer de esta amargura una energía positiva, de que esa rabia te lleve a estar un poco más enfocado, a tener más energías(..)” (La entrevista completa en https://soundcloud.com/11titulardur/tomas-rincon-hay-que-hacer-de-esa-amargura-una-fuerza-positiva).
Análisis de entorno
El primer paso de un sociólogo deportivo es analizar el entorno del equipo. No se puede intervenir en una sociedad (en este caso una selección nacional de fútbol) si no se observa el entorno que los envuelve y penetra, de la manera más completa posible. Mientras más elementos se tomen en cuenta, la acción a realizar podrá ser más efectiva. En este caso, voy a señalar 3 factores principales: La naturaleza del técnico, los jugadores, y la dificultad del torneo.
La naturaleza del técnico: Noel Sanvicente es el entrenador más ganador del fútbol nacional, y no es un título subjetivo, su trayectoria y títulos así lo demuestran. De ahí hay que destacas dos cosas: una positiva y la otra negativa. El aspecto positivo es que “Chita” tiene una mentalidad ganadora, hace lo que tiene que hacer para llegar al objetivo; a veces ha tenido dificultades externas (infraestructura, economía, talento en jugadores) pero las ha superado y eso dice bastante del “hambre” que debe tener un DT. El aspecto negativo es que su experiencia ganadora ha tenido un factor común: siempre ha sido en clubes, nunca en una selección nacional. Trabajar con un club te hace ver a los jugadores todos los días, seguir en primera persona el progreso de la idea propuesta. Trabajar con una selección nacional con tantos jugadores en el exterior implica un cambio en la concepción de la idea, ya que no ves a tus jugadores principales sino 4 o 5 días antes del partido. Esa falta de experiencia en selecciones nacionales afecta la idea del “profe Chita”, por lo que se convierte en un problema en el quipo.
Los jugadores de la selección: Venezuela ha aumentado notablemente la cantidad de jugadores nativos en el fútbol internacional, eso genera mayor roce con el deporte de alto nivel, lo que indudablemente favorece a la selección nacional. Ahora, pareciera que estos jugadores no se han desconectado del anterior DT de la Vinotinto. La mayor prueba de eso es la salida del principal referente de la selección, Juan Arango, quien no ha escondido su incomodidad por el sistema de juego planteado por Sanvicente, tanto así que signó su salida. La presión en los referentes también es factor importante. Ver a jugar a piezas como Rondón, Baroja, Vargas y Amorebieta con tal nivel de presión denota una necesidad de resultados utilizando más las ganas que la técnica. La idea no llega clara a un grupo de jugadores que están muy acomodados con la idea anterior, y que no tienen tiempo suficiente de germinar una nueva. El trabajo es lento, pero la urgencia de resultados es alta, y con eso, la frustración.
La dificultad del torneo: Vamos a estar claros, no hay eliminatoria mundialista más difícil que la sudamericana. Es la más larga, compleja y exigente del mundo. Conmebol ha colocado 5 de 6 equipos en octavos de final en Brasil 2014, 5 de 5 en Suráfrica 2010, 3 de 4 en Alemania 2006. Sin incluir la diversidad geográfica de América del Sur: el jueves puedes jugar a 3600 msnm en La Paz, para el martes jugar en Barranquilla, a nivel del mar y casi 40 grados centígrados. Al jugar los 10 países inscritos en “todos contra todos”, los equipos buscan hacerse fuertes en su casa, sacando provecho de su afición y de sus potencialidades. Es por eso que a Venezuela le cuesta tanto cada error que comete, porque las eliminatorias sudamericanas no perdonan errores. Actualmente la Vinotinto esta noveno, y se viene Bolivia de visita y recibir a Ecuador.
Acciones a tomar
Para el sociólogo deportivo es tan importante analizar cómo actuar. Las medidas a usar en la selección las baso en tres pilares fundamentales: El apoyo didáctico, la actividad grupal y el mensaje.
Apoyo didáctico: Al momento de conocerse la convocatoria, me gustaría hacer llegar a los seleccionados y al equipo técnico un agente motivacional que los ayude a entender la idea desde el sitio dónde están. En este caso le haría llegar a los jugadores una lectura que los vaya colocando en sintonía, y no considero una mejor opción que “El efecto Simeone: la motivación como estrategia”, con especial al capítulo 1 y al tema “Fe y convicción”, donde “El Cholo” habla de su experiencia en la final vs Boca cuando dirigía a Estudiantes. La idea de escrudiñar este tema es entender que la motivación te hará emprender empresas aparentemente imposibles, y que depende del equipo saberse fuerte aun cuando el entorno se note complicado. “Mi labor con los jugadores era convencerles de que siempre iban a tener una posibilidad de ganar el partido, y que el otro equipo no era infalible, también se podía equivocar. Es esto lo que hay que aprovechar. Aunque haya sólo una posibilidad entre cien, hay que agarrarse a ella.” Diego Simeone
Actividad Grupal y Mensaje: Para el momento de la actividad grupal hay que tener claro que el cuerpo técnico designo una doble convocatoria para estas dos fechas: para La Paz citó a jugadores del torneo local y para el partido de Puerto Ordaz a los extranjeros. Para el grupo que va a Bolivia la actividad a realizar sería una facilitación centrada en una misión que fomente la competitividad de la unidad en función de las circunstancias adversas. Esa actividad incluiría que cada individuo tenga una función en específico, lo que genere una responsabilidad en pro del grupo. ¿El objetivo principal? Que el grupo se sienta victorioso al lograr la meta propuesta cuando las condiciones sean adversas. Entender que cuando el grupo está concentrado, y que cada jugador está consciente de su función, la meta es alcanzable y posible.
Para el grupo que jugará vs Ecuador, la actividad sería distinta. Con los jugadores convocados para Puerto Ordaz trabajaría bajando la presión del grupo. Haría dinámicas que faciliten la comodidad y el humor del grupo. Luego, en total confidencialidad y acompañado del psicólogo, fomentaría el desahogo de los jugadores ante las ideas impartidas por el cuerpo técnico, para luego finalizar con la importancia del papel funcional de cada individuo en el sistema del equipo. La facilitación final sería utilizando la concentración como herramienta primordial para llegar a la meta como grupo.
Conclusión
El espíritu no se puede perder. Que el capitán lo diga quiere decir que el grupo esta resentido y es un tema de mucho cuidado. Por ende, la misión del sociólogo deportivo es facilitar la transición de una idea técnica a la otra, poder separar el espíritu de la concentración táctica, y buscar la unidad del equipo ante la adversidad de los factores.
No se es el peor equipo cuando se pierde, ni el mejor cuando se gana, pero en esta carrera de resistencia hay que saber apreciar que las ganas y el hambre de resultados positivos pueden hacerte progresar en tu nivel competitivo. Por el contrario, el desánimo y el desgano hacen que bajes el nivel. El entrenador debe entender esto y buscar que eso juegue a su favor “Si el DT logra penetrar en la mente del jugador, puede mejorar de forma muy importante su rendimiento” (Simeone).
La conclusión también debe salpicar a periodistas y fanáticos. Es importante entender que el espíritu competitivo tiene que tocar las fibras de los hinchas venezolanos, dejar de ir a apoyar al equipo no es una opción. Encarar las eliminatorias suramericanas como una nación unida (como lo hacen el resto de los países) facilitará el proceso de adaptación del equipo. Hay que apoyar, hay que construir, hay que depositar confianza, y, por sobre todo, hay que inyectar de motivación a un equipo que hoy más que nunca necesita el apoyo de su país. Somos la esencia de ese espíritu.